El “Pretzel escocés”, o “Pretzel de mantequilla escocesa”, es un bocadillo dulce tradicional en Escocia. Aquí tienes una receta para prepararlos:
Ingredientes:
- 225g de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
- 115g de azúcar glas
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 225g de harina para todo uso
- 115g de maicena
- 1/4 cucharadita de sal
- Azúcar granulada, para enrollar
Instrucciones:
- Precalienta tu horno a 180°C (350°F). Forra una bandeja para hornear con papel pergamino o un tapete de silicona.
- En un tazón grande, bate la mantequilla y el azúcar glas hasta que estén suaves y esponjosos.
- Agrega el extracto de vainilla y mezcla bien.
- En otro tazón, tamiza la harina, la maicena y la sal. Agrega gradualmente esta mezcla a la mezcla de mantequilla, batiendo a baja velocidad hasta que se forme una masa suave y homogénea.
- Forma la masa en pequeñas bolitas del tamaño de una nuez.
- Coloca un poco de azúcar granulada en un plato poco profundo. Pasa cada bolita de masa por el azúcar, cubriéndola uniformemente.
- Coloca las bolitas de masa en la bandeja para hornear preparada, dejando suficiente espacio entre cada una para que se expandan durante el horneado.
- Usa un tenedor para hacer una marca en la parte superior de cada bolita, aplastándola ligeramente.
- Hornea en el horno precalentado durante 12-15 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados.
- Retira del horno y deja que los pretzels escoceses se enfríen en la bandeja durante unos minutos antes de transferirlos a una rejilla para que se enfríen completamente.
Estos pretzels escoceses son perfectos para acompañar una taza de té o café. Su textura crujiente por fuera y suave por dentro, junto con el sutil sabor a mantequilla, los convierte en un bocado delicioso para disfrutar en cualquier momento del día. ¡Disfrútalos!