Ah, el pudin de pan, mi postre favorito de la infancia. Recuerdo a mi abuela en la cocina, llenando la casa de ese aroma a pan tostado y canela. Era un postre que prácticamente nos hacía olvidarnos de las penas, especialmente cuando había días nublados. ¡Y el mejor de todos! Se hacía con sobras de pan. La economía y la dulzura, una combinación perfecta. Hoy quiero compartir contigo mi versión de este clásico que no solo es delicioso, sino que también evoca buenos recuerdos.
El pudin de pan es un postre versátil y acogedor. Puedes agregarle frutas, nueces o incluso un toque de chocolate, dependiendo de lo que tengas a mano. Te prometo que cada bocado de este postre es como un abrazo cálido que te transporta a tiempos y lugares felices.
¿Qué lleva el pudin de pan?
Pan: El ingrediente estrella de este postre. Puedes usar pan del día anterior, pan integral o incluso croissants. La idea es que esté un poco duro para que absorba todo el líquido del batido sin deshacerse.
Leche: Aquí es donde se forma la base cremosa del pudin. Opta por una leche entera si quieres un pudin extra cremoso, pero la leche semidesnatada también funciona muy bien.
Huevos: Estos son esenciales para dar estructura. Agregan esa suavidad que hace que cada bocado se derrita en la boca.
Azúcar: Dependiendo de tus preferencias, puedes usar azúcar blanca, morena o incluso miel. ¡Todo lo que se adapte mejor a tu paladar!
Canela: Una especia que aporta ese sabor cálido y reconfortante. La canela es como ese amigo que siempre trae alegría a la fiesta.
Pasa: No todos son fans de las pasas, pero si te gustan, ¡añádelas! Dan un toque dulce y una textura interesante.
¿Es bueno el pudin de pan?
El pudin de pan tiene sus ventajas. Por un lado, el pan que utilizas es una buena fuente de carbohidratos, y si optas por pan integral, estarás añadiendo fibra a tu postre. La leche y los huevos te proporcionan proteínas, lo que equilibra un poco el contenido de azúcar. Pero como todo, hay que disfrutarlo con moderación, especialmente si eres sensible al azúcar o estás cuidando tu dieta. ¡El equilibrio es clave!
Ingredientes
– 4 tazas de pan viejo (cortado en cubos)
– 2 tazas de leche
– 3 huevos
– 1 taza de azúcar (puedes ajustar al gusto)
– 1 cucharadita de canela en polvo
– 1/2 taza de pasas (opcional)
– Mantequilla (para engrasar el molde)
Rinde aproximadamente para 8 porciones.
¿Cómo hacer pudin de pan?
1. Precalienta el horno a 180°C (350°F).
2. Engrasa un molde para hornear con mantequilla.
3. En un tazón grande, mezcla el pan con la leche y deja que se empape durante unos 10 minutos.
4. En otro tazón, bate los huevos con el azúcar y la canela hasta que estén bien combinados.
5. Agrega la mezcla de pan a la mezcla de huevos y mezcla bien. Si estás usando pasas, ¡agregalas aquí!
6. Vierte la mezcla en el molde engrasado y hornea durante 45-50 minutos, o hasta que esté dorado y un cuchillo salga limpio.
7. Deja enfriar un poco antes de servir, ¡y disfruta!
Delicias y recomendaciones para el pudin de pan
– Si quieres un sabor aún más intenso, puedes añadir un chorrito de vainilla en la mezcla de huevos.
– ¡No dudes en experimentar! Puedes añadir chocolate picado o frutas como manzanas o peras para dar un toque diferente.
– Sirve el pudin de pan tibio, acompañado de helado de vainilla o crema batida. Simplemente irresistible.
Espero que te animes a preparar este pudin de pan y que te llene de calidez y nostalgia, como lo hace conmigo. No olvides contarme cómo te queda y tus propias variaciones. ¡Buena suerte y feliz cocina!