Introducción
El pudín de caramelo es un postre clásico que encanta por su textura cremosa y su rico sabor a caramelo. Ideal para cualquier ocasión, desde una cena familiar hasta una celebración especial, este pudín es fácil de preparar y siempre logra impresionar. En esta entrada, te comparto una receta deliciosa para que puedas disfrutar de este dulce tentador en casa.
Ingredientes
- Para el caramelo:
- 1 taza de azúcar
- 1/4 taza de agua
- 1/4 taza de mantequilla
- 1/2 taza de crema para batir (nata)
- Para el pudín:
- 2 tazas de leche
- 1/2 taza de azúcar
- 1/4 taza de maicena (fécula de maíz)
- 1/4 cucharadita de sal
- 3 yemas de huevo
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
Instrucciones
- Preparar el caramelo: En una cacerola a fuego medio, combina el azúcar y el agua. Cocina sin remover hasta que la mezcla se torne de color ámbar dorado, aproximadamente 8-10 minutos. Retira del fuego y con cuidado añade la mantequilla y la crema para batir. Remueve con una cuchara de madera hasta que el caramelo esté completamente integrado y suave. Reserva.
- Preparar el pudín: En una cacerola grande, mezcla la leche, el azúcar, la maicena y la sal. Cocina a fuego medio, removiendo constantemente, hasta que la mezcla comience a espesar y llegue a ebullición. Reduce el fuego y cocina por 2 minutos adicionales, sin dejar de remover.
- Templar las yemas: En un bol pequeño, bate las yemas de huevo. Con cuidado, agrega una pequeña cantidad de la mezcla caliente al bol con las yemas, batiendo constantemente para evitar que se cocinen las yemas. Luego, vierte la mezcla de yemas de nuevo en la cacerola con el pudín caliente.
- Cocinar el pudín: Cocina a fuego bajo, removiendo constantemente, durante 2 minutos adicionales o hasta que el pudín esté espeso. Retira del fuego y añade el extracto de vainilla.
- Montar el postre: Vierte una capa de caramelo en el fondo de los moldes individuales o en un molde grande. Luego, vierte el pudín caliente sobre el caramelo. Deja enfriar a temperatura ambiente y luego refrigera por al menos 2 horas, o hasta que el pudín esté bien frío y firme.
- Servir: Para desmoldar el pudín, pasa un cuchillo por los bordes del molde y luego invierte sobre un plato. Si el caramelo no se despegara fácilmente, calienta el molde ligeramente en el fuego para aflojarlo. Sirve el pudín con el caramelo por encima.
Conclusión
¡Y ahí lo tienes! Un pudín de caramelo delicioso, con una textura cremosa y un sabor inigualable. Perfecto para cualquier ocasión y fácil de hacer en casa, este postre seguramente será un éxito entre tus familiares y amigos. Disfruta de cada bocado de este dulce placer que combina lo mejor del caramelo con una cremosa suavidad.