Ah, el pastel de queso fresco y frambuesas, una de mis delicias favoritas para compartir en las reuniones familiares o simplemente disfrutar en un día soleado. Recuerdo la primera vez que lo hice; estaba tratando de impresionar a un amigo que visitaba y tenía la idea de hacer algo simple, pero sabroso. Me di cuenta de que la combinación de los sabores frescos de las frambuesas con la cremosidad del queso fresco es verdaderamente mágica. Desde entonces, este pastel se ha convertido en un clásico en mi cocina.
No sé ustedes, pero me encanta cuando un postre no solo es delicioso, sino que también es colorido y alegre. Este pastel tiene esa energía que inmediatamente eleva el ánimo de cualquiera que lo pruebe. Además, es fácil de preparar, lo que lo hace aún más atractivo. Así que, ¡manos a la obra!
¿Qué lleva el Pastel de Queso Fresco y Frambuesas?
Queso fresco: Este es el ingrediente estrella del pastel. Es suave y cremoso, lo que le da esa textura deliciosa y ligera. Yo suelo usar queso fresco de marca “El Mexicano”, que tiene un sabor maravilloso.
Frambuesas: Las frambuesas frescas son una explosión de sabor y color. No puedo resistirlas; siempre que están en temporada, las añado a todo. Si no las encuentras frescas, las congeladas también hacen un buen trabajo.
Azúcar: La cantidad de azúcar puede variar según tu gusto personal. Me gusta mantenerlo ligero, pero un poco más siempre es bienvenido.
Galletas tipo María: Estas galletas son ideales para la base del pastel. Les dan un crujido delicioso y combinan muy bien con el queso.
Mantequilla: La mantequilla derretida ayuda a unir las galletas y da un sabor extra que no se puede resistir. Opto por mantequilla sin sal para evitar un exceso de salinidad.
¿Es Bueno para Ti el Pastel de Queso Fresco y Frambuesas?
Bueno, es importante tener en cuenta que, aunque el pastel es delicioso, también es un postre. Sin embargo, hay algunas cosas buenas que mencionar.
Queso fresco: Está lleno de proteínas y calcio, lo que puede ser beneficioso para los huesos.
Frambuesas: Estas pequeñas joyas no solo son hermosas, sino que también son ricas en antioxidantes y vitamina C. Realmente puedes disfrutar de un pequeño capricho con un toque de bondad.
Por otro lado, el azúcar y las galletas aportan calorías extras, así que disfrutémoslo con moderación. Después de todo, ¡la vida se trata de equilibrio!
Ingredientes
– 250 g de queso fresco
– 250 g de frambuesas
– 100 g de azúcar
– 200 g de galletas tipo María
– 100 g de mantequilla
– 1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
Rinde: 8 porciones
¿Cómo Hacer el Pastel de Queso Fresco y Frambuesas?
1. Primero, precalienta tu horno a 180°C (356°F).
2. Tritura las galletas tipo María hasta que queden en migas. Puedes hacerlo en un procesador de alimentos o metiéndolas en una bolsa y aplastándolas con un rodillo.
3. En un bol, mezcla las migas de galletas con la mantequilla derretida hasta que obtengas una mezcla homogénea.
4. Presiona esta mezcla en la base de un molde desmontable para formar la base del pastel. Asegúrate de que quede bien compacta.
5. En otro bol, mezcla el queso fresco, el azúcar y la esencia de vainilla hasta que estén bien integrados.
6. Incorpora las frambuesas a la mezcla de queso con cuidado, para no aplastarlas demasiado.
7. Vierte la mezcla sobre la base de galletas en el molde.
8. Hornea durante 30-35 minutos o hasta que el pastel esté firme al tacto.
9. Deja enfriar a temperatura ambiente y luego refrigera por al menos 2 horas antes de servir.
¡Consejos Para Hacer el Mejor Pastel!
– Puedes sustituir las frambuesas por otras frutas como fresas o arándanos si lo prefieres.
– Para una presentación divertida, añade algunas frambuesas frescas encima del pastel al momento de servir.
– ¡No te olvides de un poco de crema batida o un toque de helado de vainilla para acompañar!
Les aseguro que este pastel será un éxito. Lo he hecho muchas veces y siempre me piden la receta. Si te animas a hacerlo, ¡me encantaría escuchar cómo te fue! Estoy segura de que se convertirá en uno de tus postres favoritos también. ¡Feliz cocina y a disfrutar de cada bocado!