¡Hola, amigos! Hoy estoy emocionado de compartir con ustedes una de mis recetas favoritas: el **Chili Blanco de Pollo en Olla de Cocción Lenta**. Esta delicia reconfortante es perfecta para esos días en los que quieres algo sabroso y fácil de preparar. Aquí en casa, cada vez que lo cocino, me trae recuerdos de las reuniones familiares en las que todos nos sentamos juntos a disfrutar de un delicioso plato y una buena charla. La mezcla de sabores y la suavidad del pollo me hacen sentir como si estuviera en casa, rodeada de amor y risa.
La mejor parte de esta receta es que se hace en la olla de cocción lenta, lo que significa que puedes dejar que se cocine mientras haces otras cosas. Además, es un plato versátil que se puede ajustar a tus preferencias personales. ¡Así que asegúrate de tener a mano alguna tortilla o pan para acompañar!
¿Qué lleva el Chili Blanco de Pollo?
Pollo desmenuzado: El protagonista de esta receta. Utilizo pechugas de pollo, ya que quedan jugosas y tiernas. Me encanta cocinar las pechugas en la olla de cocción lenta para que se deshagan fácilmente cuando estén listas.
Frijoles blancos: Duran mucho tiempo en la despensa y aportan una textura cremosa al chili. Los frijoles cannellini son mis favoritos por su suave sabor.
Caldo de pollo: Este ingrediente es clave para darle toda esa profundidad de sabor. Prefiero usar caldo bajo en sodio para tener más control sobre el contenido de sal.
Chiles verdes: Le dan un toque ligero y picante que hace que este chili sea diferente y emocionante. Puedes usar chiles enlatados o frescos, dependiendo de lo que tengas a mano.
Cebolla y ajo: Dos ingredientes que nunca pueden faltar en mi cocina. La cebolla agrega dulzura y el ajo un sabor profundo y delicioso.
Especias (comino, orégano, pimentón): Estas especias aportan ese toque especial que realza todos los sabores. Me gusta usar pimentón ahumado para un sabor extra.
¿Es bueno para ti el Chili Blanco de Pollo?
La respuesta corta es ¡sí! Este chili es rico en proteínas gracias al pollo y los frijoles blancos, y está lleno de nutrientes. La cebolla y el ajo son excelentes para el sistema inmunológico y pueden ayudar a mantenerte saludable. Además, la cilantro que puedes agregar al final le da un extra de frescura y beneficios antioxidantes.
Sin embargo, hay que considerar la cantidad de sodio, especialmente si utilizas caldo o chiles enlatados. Así que asegúrate de ir por opciones bajas en sodio. ¡El equilibrio es clave!
Ingredientes
– 4 pechugas de pollo
– 2 latas de frijoles blancos (cannellini)
– 4 tazas de caldo de pollo bajo en sodio
– 2 latas de chiles verdes
– 1 cebolla picada
– 3 dientes de ajo picados
– 1 cucharadita de comino
– 1 cucharadita de orégano seco
– 1 cucharadita de pimentón ahumado
– Sal y pimienta al gusto
Esta receta sirve aproximadamente a 6 personas, así que es ideal para una cena familiar o para llevar al trabajo.
¿Cómo hacer Chili Blanco de Pollo?
1. En la olla de cocción lenta, coloca las pechugas de pollo.
2. Añade las latas de frijoles blancos escurridos, el caldo de pollo, los chiles verdes, la cebolla, el ajo, el comino, el orégano y el pimentón. Remueve bien para mezclar todos los ingredientes.
3. Cubre la olla y cocina a fuego lento durante 6-8 horas o a temperatura alta durante 4-5 horas, hasta que el pollo esté completamente cocido y tierno.
4. Retira las pechugas de pollo y desmenúzalas con dos tenedores. Regresa el pollo desmenuzado a la olla y mezcla bien.
5. Ajusta la sal y la pimienta al gusto antes de servir.
Tips y Variaciones Revisados
– Si quieres un chili más espeso, puedes triturar un poco de frijoles con un tenedor antes de añadirlos a la olla.
– ¿Te gustan los sabores más intensos? Agrega un poco de chile en polvo o jalapeños frescos.
– Sirve con crema agria, aguacate en rodajas y cilantro fresco por encima para darle un toque espectacular.
Así que ahí lo tienes, amigos. Esta receta de **Chili Blanco de Pollo en Olla de Cocción Lenta** es perfecta para compartir y disfrutar en cualquier momento. Espero que te animes a probarla, y si lo haces, ¡me encantaría escuchar cómo te quedó! ¡Buen provecho!