Nada me alegra más que un pedazo de delicioso pastel de leche condensada. Este es un postre que siempre me transporta a mi infancia, cuando mi abuela lo preparaba para las reuniones familiares. Recuerdo esos días soleados en su cocina, con el aroma del pastel horneándose llenando el aire y la emoción de todos al probar ese manjar. Lo que más me encanta de este pastel es su sencillez: solo necesitas un puñado de ingredientes y un poco de amor.
Este pastel es ideal para cualquier ocasión, ya sea un cumpleaños, una celebración o simplemente un capricho del fin de semana. Su textura esponjosa y su dulzura son simplemente irresistibles. ¡Vamos a sumergirnos en la receta y preparar juntos este delicioso pastel de leche condensada!
¿Qué lleva el Pastel de Leche Condensada?
Leche condensada: Este es el ingrediente estrella de la receta. Le da al pastel esa dulzura y cremosidad inconfundibles. Opto por la leche condensada de marca La Lechera, es mi favorita por su calidad y sabor.
Harina de trigo: La base que unirá todos los ingredientes. Usualmente uso harina todo uso para que el pastel tenga una buena textura.
Huevos: Le aportan consistencia y esponjosidad, así que asegúrate de que estén frescos.
Polvo de hornear: Este es el encargado de que nuestro pastel suba y quede bien ligero.
Vainilla: Un chorrito de extracto de vainilla realza el sabor. ¡No escatimes en esto!
¿Es bueno el Pastel de Leche Condensada?
Claro, este pastel tiene sus delicias y también algunas consideraciones.
Leche condensada: Aunque es deliciosa, contiene un alto contenido de azúcar, así que es mejor disfrutarla con moderación.
Huevos: Son una gran fuente de proteínas y nutrientes, así que no hay problema en incluirlos.
Harina de trigo: Si buscas una opción más saludable, puedes experimentar con harinas integrales, pero la textura puede cambiar un poco.
Como todo postre, trata de disfrutarlo en porciones adecuadas, y así podrás deleitarte con cada bocado sin remordimientos.
Ingredientes
– 1 lata de leche condensada (aproximadamente 397g)
– 4 huevos
– 1 taza de harina de trigo (aproximadamente 120g)
– 1 cucharadita de polvo de hornear
– 1 cucharadita de extracto de vainilla
– Una pizca de sal
Este pastel rinde para aproximadamente 8 porciones, perfecto para compartir.
¿Cómo hacer el Pastel de Leche Condensada?
1. Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa un molde para pastel de aproximadamente 20 cm.
2. En un tazón grande, bate los huevos con la leche condensada hasta que estén bien incorporados.
3. Agrega el extracto de vainilla y mezcla nuevamente.
4. En otro tazón, tamiza la harina, el polvo de hornear y la sal. Esto ayudará a evitar grumos.
5. Poco a poco, añade la mezcla de ingredientes secos a la mezcla húmeda, batiendo hasta obtener una mezcla homogénea y suave.
6. Vierte la mezcla en el molde engrasado y hornea durante 30-35 minutos o hasta que al insertar un palillo, este salga limpio.
7. Deja enfriar en el molde durante 10 minutos antes de desmoldar y dejar enfriar completamente sobre una rejilla.
¡Consejitos para un Pastel Perfecto!
– Puedes añadir un poco de ralladura de limón o naranja a la mezcla para un toque de frescura.
– Si te gusta el chocolate, añade un poco de cacao en polvo a la mezcla para un pastel de chocolate de leche condensada.
– ¡No olvides decorarlo! Un poco de crema batida y fresas frescas encima lo harán aún más irresistible.
Te animo a que pruebes esta receta en tu próxima reunión. Estoy segura de que a todos les encantará tanto como a mí. No dudes en compartir tus experiencias y cómo quedó tu pastel; ¡me encanta escuchar las historias de otros cocineros! Así que, ¡manos a la obra y a disfrutar de un delicioso pastel de leche condensada!