¡Hola, amigos! Hoy quiero compartir con ustedes una de mis recetas favoritas: el delicioso pastel de chocolate y menta. Desde la primera vez que lo preparé, supe que había encontrado un verdadero tesoro. La combinación del chocolate rico y decadente con el frescor de la menta es simplemente irresistible. Recuerdo que lo hice para celebrar el cumpleaños de mi amigo, y todos estaban tan felices que se olvidaron de soplar las velas. Así de bueno es este pastel.
Lo que más me encanta de esta receta es que es perfecta para cualquier ocasión, ya sea una fiesta, un almuerzo especial o simplemente un día en el que necesites un capricho. ¡Y te prometo que no te llevará mucho tiempo hacerlo! Así que, sin más preámbulos, pasemos al grano.
¿Qué lleva el pastel de chocolate y menta?
Chocolate negro: Este es el héroe de la receta. Utiliza un buen chocolate negro para obtener un sabor profundo y rico. Me gusta usar chocolate con al menos un 70% de cacao para que el sabor sea intenso.
Harina: La harina aporta la estructura necesaria para que nuestro pastel suba bien. Puedes usar harina todo uso sin problemas.
Azúcar: Este ingrediente endulza nuestro pastel, y me gusta combinar azúcar blanca con un poco de azúcar moreno para un toque extra de sabor.
Huevos: Los huevos son esenciales para darle humedad y suavidad al pastel. Elige siempre huevos frescos; ¡la diferencia se nota!
Extracto de menta: Aquí es donde la magia sucede, el extracto de menta le da a este pastel su sabor característico. Asegúrate de conseguir uno de buena calidad para que el sabor sea auténtico.
Leche: La leche ayuda a que el pastel sea más húmedo. Puedes usar leche entera o una alternativa de origen vegetal, dependerá de tus gustos.
Polvo de hornear: Esto nos ayuda a que nuestro pastel crezca y tenga esa textura esponjosa que todos amamos.
¿Es bueno para ti el pastel de chocolate y menta?
Claro, hay ocasiones en las que hacer un capricho está justificado, ¡y este pastel es una de ellas! El chocolate negro está lleno de antioxidantes, lo que puede ayudar a mejorar tu salud cardiovascular. Además, tiene beneficios para el humor, así que, si estás sintiendo un poco de tristeza, este pastel puede ser tu mejor amigo.
Sin embargo, como es un pastel, no podemos olvidar que contiene azúcar y calorías. Por lo tanto, disfrutarlo de vez en cuando es lo recomendable. Los huevos y la leche también aportan proteínas, así que no todo es malo. ¡Todo con moderación!
Lista de ingredientes
– 200g de chocolate negro
– 150g de harina
– 200g de azúcar
– 3 huevos
– 100ml de leche
– 1 cucharadita de extracto de menta
– 1 cucharadita de polvo de hornear
Rinde para 8 porciones.
¿Cómo hacer el pastel de chocolate y menta?
1. Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa un molde para pastel.
2. Derrite el chocolate negro en un tazón resistente al calor, ya sea en el microondas o al baño maría. Deja enfriar un poco.
3. En un bol grande, bate los huevos y el azúcar hasta que estén bien mezclados y esponjosos.
4. Agrega el chocolate derretido a la mezcla y mezcla bien.
5. Añade el extracto de menta y la leche, y mezcla hasta que esté bien incorporado.
6. Tamiza la harina y el polvo de hornear en la mezcla y mezcla suavemente hasta que no veas grumos.
7. Vierte la mezcla en el molde y hornea durante 30 minutos o hasta que al insertar un palillo, este salga limpio.
8. Deja enfriar el pastel en el molde durante 10 minutos antes de desmoldarlo sobre una rejilla.
Consejillos para disfrutar a tu manera
Si te gusta la decoración, prueba a agregar un glaseado de chocolate o un poco de crema de menta en la parte superior del pastel. También puedes decorar con algunas hojas de menta fresca para un aspecto espectacular.
Otra idea divertida es añadir trozos de chocolate o chispas de menta a la mezcla antes de hornear. ¡La sorpresa en cada bocado es simplemente deliciosa!
No puedo esperar a que pruebes esta receta y disfrutes de esta delicia. Es un pastel que siempre crea sonrisas y recuerdos felices. Si lo haces, ¡no olvides compartir tu experiencia! Quiero saber cómo te quedó y cualquier toque personal que le hayas dado. ¡A cocinar!